6 de mayo de 2009
Atracción sexual hacia personas del sexo opuesto. El término fue acuñado a finales del siglo XIX como concepto alternativo a homosexualidad y bisexual
Son dos mujeres y se casaron en 1901
MARCELA Y ELISA, maestras de escuela, vivieron su lesbianismo en secreto hasta que decidieron casarse por la Iglesia. Para engañar al sacerdote Elisa se hizo pasar por Mario y llevó al altar a su amada, hija de un capitán del Ejército. Ocurrió en A Coruña, el 8 de junio de 1901. Al ser descubiertas, tuvieron que huir de España. Pero ya habían pasado a la Historia como el primer matrimonio homosexual
MANUEL GARCÍA SOLANO
Decía Gaudí que quienes perpetúan la copia impiden el progreso y que sólo los que apuestan por la originalidad y por descubrir nuevas vías contribuyen a que evolucione la sociedad y la vida del ser humano. El arquitecto catalán se refería básicamente al arte pero una pareja de mujeres de su época hizo, se supone que involuntariamente, suyo el precepto y se adelantó considerablemente a su tiempo. En su caso fue la necesidad de oficializar su amor la que agudizó el ingenio tanto como para convertirse en el primer matrimonio homosexual del que se tiene constancia registral.
Marcela Gracia Ibeas y Elisa Sánchez Loriga pasaron por la vicaría de la parroquia de San Jorge en A Coruña un 8 de junio de 1901.No es que el cura fuera un liberal dispuesto a crear escuela con su permisividad. Fue una víctima de las circunstancias. Porque para los padrinos y los testigos de aquel enlace, y por supuesto para el párroco, quien besaba y hacía arrumacos a Marcela no era otra mujer, sino Mario, un treintañero de incipiente bigote.Un nombre y una identidad ficticia de Elisa que le permitieron contraer matrimonio con la que era su pareja desde hacía años.
Un amor clandestino, abrigado en las noches de duro invierno en el entorno de A Costa da Morte, donde los relatos junto al fuego tenían como protagonistas a hombres rudos y curtidos en mil batallas con el mar. En el verano de 1901 los naufragios y las mareas, acontecimientos cotidianos, dieron paso a las tertulias sobre el escandaloso matrimonio de dos mujeres al calor de las cocinas de leña.
Las dos chicas se habían conocido durante su etapa de estudiantes en la Escuela Normal de Maestras de A Coruña, donde se formaban las futuras profesoras de enseñanza primaria (maestras). Se hicieron inseparables. Lo que comenzó siendo una amistad pronto dio paso a una relación más intensa e íntima Las constantes alusiones a su amiga, las sospechas de que su amistad iba más allá de lo permitido socialmente entre dos chicas y el temor a que la escandalera salpicara para siempre la vida de su hija llevó a los padres de Marcela a enviarla a Madrid con el propósito de bolero de que la distancia fuese el olvido.
Pero como el amor no tiene fronteras, la pareja volvió a reencontrarse.Ambas habían finalizado sus estudios. Elisa fue destinada como maestra interina a Couso, una pequeña parroquia de Coristanco, localidad coruñesa situada entre A Coruña y Finisterre. En el municipio vecino de Vimianzo, en la aldea de Calo, se instaló Marcela, ya como maestra superior.
El reencuentro avivó la llama de su relación y comenzaron a vivir juntas en Calo. Allí permaneció Elisa dando clases cuando Marcela se marchó a otra localidad cercana, Dumbría, donde se instaló en la casa escuela sobre 1889. Sin embargo, cada noche Elisa recorría la docena de kilómetros que las separaban para dormir con su amada.
La convivencia durante años de las dos mujeres fue respetada por los vecinos, no se sabe bien si por desconocimiento de que existía una relación más estrecha entre ambas o por una transigencia poco acorde con el espíritu represor de la época con las conductas homosexuales.
Todo cambió en 1901 cuando Elisa, que hasta entonces se relacionaba con las familias más distinguidas de Vimianzo y Dumbría, decidió masculinizar su aspecto, probablemente con el fin de dar un baño de oficialidad a su amor y su relación. Con imagen de varón, que ya no abandonó, se presentó en la Escuela Normal para solicitar un certificado de estudios.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario